Pues aquí comienza historia de Elena & José, bueno para ser más concreto, la historia de su boda en la Catedral de Burgos y en la fiesta en Casa Secuoya, un lugar realmente único donde se mezcla la naturaleza y la arquitectura de una forma única y maravillosa.
Toda historia tiene un comienzo y este día empezó con Elena y José cambiándose y poniéndose, aún más guapos de lo que son, en el Hotel Landa, eso sí, para los más puretas, cambiándose en habitaciones separadas.
Ambos eligieron el Landa como lugar para sus preparativos, porque además de ser un lugar super bonito y especial, nos dió la posibilidad de hacer un pequeño encuentro entre ellos antes de la ceremonia sin tener que desplazarnos, y fue…ay!!! que bonito fue.
José se vistió primero, mientras Elena se peinaba y se maquillaba bien acompañada por Nerea y las chicas de Selvaje Burgos.
José se puso elegante con un traje de Bomvivant que claro, como el tío esta como un toro de fuerte, le quedaba como un guante. Y si además se acompaña el momento de vestirse con sus padrinos con unos chupitos, la cosa se pone divertida.
Mientras, la reina de la boda se preparaba con un vestido de Rosa Clará, unos zapatos increíbles de Jimmy Choo, y muchas más cosas bonitas.
Después de vestirse hice que se encontraran en el hotel, se quisieran mucho, llorases un poquito y me regalaran fotitos maravillosas.
De la ceremonia os cuento poco, y os enseño algo…la catedral de Burgos y la capilla de Santa Tecla fueron testigos de unos votos mágicos que llenaron de lagrimas mis ojitos, cosas del directo.
Después fuimos a la casa más bestial en la que he tenido la suerte de hacer fotos, la Casa Secuoya, donde además de una comida indescriptible a cargo de Ricardo Temiño y La Fábrica, montaron un fiestón de los que hacen historia, con un final épico y un concierto de los Grotesque, es que no pudo ser más grande.
Para más inri compartí día con uno de los videógrafos que más admiro y quiero del panorama nacional, ese pequeño gran hombre llamado Older Garcia. Gracias amigo por los momentos que pasamos juntos que siempre se quedan el mi cabezota pelona…
Y gracias a Elena, gracias a José y a todos los que hicisteis posible un día tan alucinante.
